
Las herramientas de Inteligencia Artificial (IA) están empezando a asumir funciones críticas en las empresas, como la selección de personal. Esta tendencia podría tener consecuencias inesperadas. El caso del “reclutador de IA” Alex, que ha recaudado 17 millones de dólares para realizar entrevistas sin intervención humana, plantea una cuestión clave: ¿qué ocurre cuando se dejan en manos de una máquina decisiones sensibles sin supervisión humana suficiente? En un estudio publicado en 2024, Kaspersky reveló en su informe “Connecting the future of business” que casi la mitad (48%) de las empresas europeas ya habían incorporado la IA y el Internet de las Cosas (IoT) en sus estructuras, y un 30% planeaba hacerlo en los dos años siguientes. Sin embargo, entre el 21% y el 30% de las organizaciones consideraban que estas tecnologías eran “muy difíciles” o “extremadamente difíciles” de proteger, lo que demuestra que la adopción tecnológica avanza más rápido que las medidas de ciberseguridad.
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