Ricoh acaba de anunciar que uno de los principales fabricantes de automóviles del mundo, Daimler, ha elegido a la marca para la producción de piezas de prototipos bajo demanda.

La impresión 3D se ha convertido ya en la gran aliada de las empresas de automoción, ya que hace posible la identificación de mejoras en las piezas a producir, antes incluso de su creación física, lo que permite a las empresas automovilísticas ser más creativas e innovadoras, al tiempo que ahorran en costes de producción, de tiempo y se ven capacitadas para mejorar su Time to Market.
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