Hoy en día, nuestros hogares se han vuelto multifuncionales. Las salas de estar ahora se están convirtiendo en centros de entrenamiento, estudios de yoga, cines y aulas improvisadas. El mostrador o incluso la mesa de la cocina son ahora en ocasiones un escritorio de oficina remoto. Vivir en esta “nueva normalidad” nos ha obligado a ser más creativos para encajar nuestras rutinas diarias en espacios limitados.
Sigue leyendo