Equinix, la compañía de infraestructura digital del mundo®, ha revelado que los españoles son los europeos que más utilizan la inteligencia artificial de forma consciente, y también que son los que menos temen y son más optimistas con esta tecnología.

Según una encuesta elaborada por la compañía entre 6.000 personas en España, Alemania, Finlandia, Suecia, Suiza y Reino Unido, un 67,4% de los españoles utiliza de forma consciente la IA todas las semanas, frente al 58,2% de media de estos seis países.

En esta línea, un 25,9% de los españoles afirma usar la IA varias veces al día y un 10% la usa al menos una vez al día. Es decir, un 35,9% la usa a diario, más de tres décimas por encima de la media europea (32,8%). A ellos hay que sumar un 31,5% que la usa varias veces por semana, frente a un 25,5% de la media europea.

En nuestro país, las mujeres son quienes más utilizan la IA. Un 68,3% la utiliza varias veces por semana, frente a un 66,5% de los hombres. La diferencia es aún mayor en un uso diario, ya que un 38,9% de las españolas utilizan esta tecnología todos los días (un 26,3% varias veces al día, 12,7% al menos una), frente a un 32,7% de los hombres.

Paradójicamente, aunque las mujeres son las que más utilizan la Inteligencia Artificial en España, también se muestran más “nerviosas o preocupadas” que los hombres (13,2% frente a un 10,9%). También son los hombres los que están “más emocionados” con esta tecnología (14,2% frente a un 9% de las mujeres).

¿Pero entendemos cómo funciona la IA? Creemos que sí, pero no de forma abrumadora. Un 56% de los españoles se muestra confiado con su entendimiento sobre cómo funciona la IA, frente a un 41,1% que no sienten confianza en su entendimiento. Estos datos están bastante en la línea europea (55,8% y 39%). Resulta curiosa la diferencia por géneros: los hombres españoles se muestran mucho más confiados (60,5%) que las mujeres (un 51,8%) en que entienden cómo funciona la IA.

¿No somos conscientes de que usamos IA?

Resulta llamativo también que a nivel europeo solo un 12,3% cree utilzar la IA solo “unas pocas veces al mes” y un 11,5% solo una vez al mes. Además, un 17,5% asegura que “nunca” utiliza la inteligencia artificial, una cifra que se reduce al 13,7% en España. Unas cifras que chocan con el alto grado de penetración que ha tenido la IA en todas las soluciones tecnológicas que utilizamos a diario, seamos o no conscientes de ello.

Si se analiza el uso según la edad hay mayores diferencias. Las franjas de edad de personas más mayores muestran que utilizan menos la IA de forma activa y que son menos conscientes de la integración de la IA en múltiples productos y servicios que utilizan.

La penetración de un uso semanal de la IA es elevada en España en todas las franjas de edad y va descendiendo de los más jovenes a los más mayores. De los 16 a 24 años la utilizan de forma consciente todas las semanas un 87,3% de los españoles; cifra que baja en el caso de los 25 a los 34 años a un 86,6%, a un 78,1% en la franja de los 35 a los 44 años, a un 72,4% entre los 45 y 54 años.

En el caso de los mayores de 55 años, el uso consciente de la IA cae hasta el 48,6% de forma semanal en España, lo que muestra que no emplean esta tecnología de forma activa y que tampoco son conscientes de hacerlo. Además, un 26% de los españoles de esta edad dicen que no utilizan nunca la IA, porcentaje que asciende a un 30,2% de media teniendo en cuenta el resto de países.

Bruce Owen, presidente de Equinix en EMEA, señala: “La IA ya está en tu bolsillo, en tu muñeca y en tu bandeja de entrada, pero estos datos demuestran que la mayoría de la gente no lo sabe. Si queremos aprovechar el verdadero potencial de la IA, necesitamos una mayor comprensión de cómo ya la estamos utilizando. La innovación empieza por la educación”.

Quienes más intensamente utilizan la IA, o son más conscientes de ello, no es la franja más joven de los españoles. Ese título se lo llevan los españoles de 25 a 34 años, que la utilizan a diario en un 61,4% de los casos. A ellos sí que les siguen los jóvenes de 16 a 24 años, ya que un 52,7% de ellos utilizan la IA a diario de forma consciente.

En el caso de las franjas de edad, ocurre algo similar a la diferencia entre hombres y mujeres. Aunque los jóvenes de 25 a 34 años son quienes más usan la IA, también son los que se muestran más preocupados o nerviosos por esta tecnología (15,8%) seguidos por los mayores de 55 (13,4%). Los jóvenes de 16 a 24 son los menos preocupados (7,3%).

De media, solo un 12,1% de los españoles se siente “preocupado o nervioso” por el crecimiento de la IA en la sociedad, únicamente por encima de Suiza (un 11,9%). Todos los demás países muestran mayor recelo con respecto al auge de esta tecnología: siendo los finlandeses los más preocupados (18,9%), alemanes (18%), británicos (17,6%) y suecos (15,7%).  La media europea de “preocupación o nerviosismo” se sitúa en un 15,7%.

No resulta extraño, pues, que los españoles sean los europeos que sienten más curiosidad (28,5%) y optimismo (26,8%), bastante por encima de la media europea (22,8% y 19,7%, respectivamente) de los países europeos encuestados.

El hogar de la IA

La Era de la Inteligencia Artificial ha llegado y cada vez está más presente en la tecnología que utilizamos, directa o indirectamente, seamos conscientes de ellos o no. Pero la IA no vive en silos. La IA distribuida ya está redefiniendo industrias, acelerando el descubrimiento y desbloqueando posibilidades infinitas. Pero la innovación no puede prosperar sin un mayor conocimiento público que garantice que la tecnología sea accesible, aceptada y utilizada de forma eficiente a gran escala.

Con más de 120 centros de datos en EMEA, Equinix proporciona la base para la IA y los beneficios que puede aportar a la sociedad. Una infraestructura segura, interconectada y de baja latencia permite que la IA cumpla su promesa. Para seguir avanzando, Equinix ha lanzado recientemente un AI Proving Ground global, que ofrece a las empresas un entorno dinámico para colaborar con los principales socios tecnológicos de IA, probar soluciones conjuntas, reducir riesgos y acelerar el tiempo de llegada al mercado.

“Las plataformas de IA pueden ahora diseñar moléculas para medicamentos que llegan a ensayos clínicos en menos de 18 meses, en lugar de varios años; permiten que los termostatos inteligentes aprendan rutinas diarias y la intensidad de carbono de la red para ahorrar energía y costes; e incluso mejoran la calidad alimentaria, optimizando procesos de producción y reduciendo el desperdicio”.

“Ninguno de estos avances sería posible sin la infraestructura que los conecta. En Equinix conectamos a personas de todo el mundo, pero la conexión por sí sola no es suficiente. La confianza sin un verdadero entendimiento puede ralentizar la adopción y limitar el potencial de la IA para transformar la salud, la economía y la sociedad. Ahora es el momento de que gobiernos e industria prioricen la educación en IA junto al desarrollo de infraestructuras, para que la innovación se adopte con claridad y no con confusión”, ha precisado el directivo.