Internet es, hoy en día, un lugar esencial para mantener la comunicación con amigos o compañeros, para investigar y para aprender y, como tal, la mayoría de los niños de nuestro entorno hacen uso de la Red en su día a día. Pero Internet también oculta una serie de riesgos y amenazas para ellos, por lo que es necesario que su entorno sea conocedor de tales peligros y sepa identificarlos para tomar precauciones y evitar que los menores resulten afectados.
Con motivo del día internacional de la seguridad informática, que se celebra cada 30 de noviembre, ESET España se ha unido a las campañas de lucha contra el acoso escolar para proteger a los más vulnerables cuando sufren hostigamiento en Internet. Para ello ha lanzado una serie de videos que pretenden concienciar a la población acerca de esta problemática. En ellos se recoge el testimonio real de 9 padres con hijos con edades comprendidas entre los 2 y los 15 años. “Jamás nos preguntamos cómo reaccionaríamos ante un caso de ciberacoso y, sin embargo, cualquier persona que tenga hijos está expuesta a pasar por ahí. Por tanto es útil conocer no sólo ciertas recomendaciones para evitar que ocurra si no también saber qué hacer si no hemos podido llegar a tiempo”, explica Laura Grau Berlanga, responsable de marketing en ESET España.
“En muchas ocasiones, el ciberacoso llega de forma paralela al hostigamiento en el mundo físico e incluso hay veces en que sólo se produce un acoso digital”, afirma Josep Albors, director del laboratorio de ESET España. “Además, el hecho de que muchas veces el niño se encuentre solo frente a la pantalla del ordenador, smartphone o tablet cuando está sufriendo el acoso, hace que los padres o el resto del entorno no se dé cuenta, por lo que es importante estar atento a cualquier cambio de humor e interesarnos por las actividades que lleva a cabo cuando está conectado”.
Las formas más comunes de ciberacoso a menores se reparten entre la difusión de falsos rumores, fotografías humillantes –incluso mediante montajes o “memes”-, insultos, exclusión de grupos o con la creación de perfiles falsos que insultan a la víctima. Save the Children, en su informe sobre acoso escolar en España, afirma que uno de cada diez niños sufre algún tipo de vejación física por parte de compañeros y un 6,9% ha sufrido ciberacoso (lo que supondría unas 82.000 víctimas). La causa es, según la respuesta de la mayoría de los acosadores, simplemente “bromear”. De hecho, más de un tercio de los niños encuestados afirma haber recibido insultos en el móvil pero no les han dado importancia.
“Cuando un niño está siendo acosado puede sentir miedo al rechazo en caso de contar lo que le ocurre, por lo que hay que animar a su entorno a denunciar la situación en cuanto la conozca, porque cualquiera puede ser víctima del ciberacoso hoy en día”, continúa Albors. “Compartir imágenes denigrantes o insultar en la red es un delito, no es ninguna broma, por lo que no denunciarlo a tiempo supone encubrimiento, así que es mejor contar a los padres o a los profesores cualquier comportamiento amenazador hacia un compañero”.
En este sentido, desde ESET, se recomienda a padres y profesores los siguientes consejos para intentar, en la medida de lo posible, evitar el ciberacoso:
– Aprende a utilizar Internet tal y como lo hace el niño: conoce sus redes sociales favoritas, en qué chats conversa con sus amigos, con qué personas se relaciona y juega online.
– No le hagas sentir culpable con sus comportamientos en Internet y empatiza con sus formas de comunicarse con sus amigos recordándole que no comparta información personal, contraseñas o fotos.
-Enséñale a desconfiar en Internet de lo desconocido de la misma manera que lo haces en el mundo físico: que no acepte mensajes de desconocidos y que no abra archivos enviados por personas que no son de su confianza.
– Controla el uso de la webcam para que solo la utilice bajo supervisión de adultos. Existen herramientas en Internet que avisan además si se conecta de forma indebida, como ESET Smart Security Premium y ESET Internet Security 10 , que monitorizan en todo momento los procesos y aplicaciones que están en ejecución en los equipos para determinar cuáles intentan utilizar la webcam sin autorización.
– Utiliza una solución de control parental, como ESET Parental Control, para monitorizar su actividad, las aplicaciones que utiliza y durante cuánto tiempo.
– Utiliza Internet con él para que tenga siempre confianza a la hora de contar cualquier comportamiento sospechoso que pueda observar.
Desde ESET se recomienda que se proporcionen todos los medios posibles a la víctima y a su entorno para averiguar el motivo del acoso y frenarlo. Además, recuerdan que ya existe un teléfono gratuito puesto en marcha por el Ministerio de Educación para denunciar y luchar contra el acoso escolar: 900 018 018.