Cada fin de semana en el que se disputa un Gran Premio de Fórmula 1, las emociones se disparan en la pista y los boxes, la tensión es palpable y los trabajadores de Ferrari están pendientes de que todos los componentes de los bólidos estén listos para que estos consigan los mejores resultados y los espectadores tengan un buen espectáculo. Sin embargo, poca gente es consciente de lo que hay detrás.
Más de un centenar de personas del equipo de Ferrari trabajan al límite durante los cuatro días (entrenamientos libres, clasificación y carrera) que dura cada uno de los 19 grandes premios que componen cada temporada. Durante ese periodo, cada una de las personas que está allí debe preocuparse de su trabajo y no estar pendiente de la seguridad de los dispositivos tecnológicos con los que trabajan que, como todos, son vulnerables. Es ahí donde comienza la carrera de Kaspersky Lab, responsable de la seguridad informática de la escudería.
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