Hay colaboraciones que despiertan interés, y luego están aquellas capaces de reavivar emociones que parecían archivadas en la memoria. La nueva alianza entre CASETiFY y los eternamente entrañables Care Bears no sólo rescata una estética dulce de los años ochenta: recupera, con intención y modernidad, la promesa de un mundo más amable.

Presentada desde Hong Kong, la colección invita a cruzar una puerta directa hacia Care-A-Lot, ese lugar imaginario donde las nubes son mullidas, las preocupaciones breves y el cariño, ese gesto que hoy se reivindica como acto radical, se convierte en idioma universal. Los fans de varias generaciones reconocerán los colores vibrantes, los símbolos en las barriguitas y ese optimismo inquebrantable que acompañó tarjetas, series animadas y películas desde 1982. Pero ahora lo harán en un nuevo soporte: el de la tecnología que llevamos a todas partes.

La colección se articula en distintos sets que funcionan como pequeños universos. Está el Nostalgia Set, un estallido cromático que reúne a todos los ositos más icónicos en una misma pieza; el etéreo Twilight Dreams, con su acabado espejo que refleja un cielo púrpura donde todavía puede ocurrir la magia; o los sets dedicados a un único oso, Share Bear, Cheer Bear y el siempre gruñón pero adorable Grumpy Bear, pensados para quienes encuentran en un solo personaje un reflejo de sí mismos.

Para los verdaderos coleccionistas, el Wishes Collector Set aparece como un cofre brillante, de esos que se abren lentamente, sabiendo que dentro habrá sorpresas destinadas a sacudir la nostalgia. Y sí, también existe un dangler de Cheer Bear de edición especial y difícil de conseguir, casi como un amuleto secreto destinado únicamente a los más afortunados.

Más allá del encanto emocional, la colaboración demuestra una comprensión profunda del objeto contemporáneo: nuestros teléfonos, nuestras tablets, nuestros dispositivos… Son extensiones de identidad. CASETiFY lo sabe, y por eso incorpora fundas personalizables que permiten añadir fotografías, textos y pequeños recuerdos que convierten un accesorio en una declaración íntima.

El Mix and Match Bundle, por su parte, funciona como un juego estilístico: mezclar, coordinar, reinterpretar. Crear un pequeño ecosistema tecnológico que hable de quiénes somos hoy y de quiénes fuimos cuando los Care Bears vivían en nuestras carpetas del colegio.

“Los Care Bears siempre han tratado de difundir positividad y conexión”, señaló Robert Prinzo, de Cloudco Entertainment. Y, efectivamente, hay algo profundamente actual en esa misión. En un mundo donde las pantallas muchas veces aíslan, esta colección propone un giro inesperado: convertirlas en recordatorios de ternura.

Las ilustraciones, irresistiblemente nostálgicas, conviven con la estética depurada y moderna de CASETiFY, creando un equilibrio que podría definirse como la versión 2025 del cute chic. Fundas para móvil y tablet, charms, cargadores inalámbricos, earbud cases y más, todos vestidos con colores que parecen extraídos de un amanecer azucarado, se integran en un catálogo que oscila entre lo lúdico y lo aspiracional.

Con precios de entre 45 y 115 euros, la colección se presenta como un capricho accesible y cuidadosamente diseñado. Una pieza de moda emocional.

En el auge de la estética Y2K, del maximalismo pastel y del rescate de iconos culturales infantiles, el retorno de los Care Bears no es una coincidencia: es una consecuencia natural del momento. A medida que la cultura visual revisita sus archivos, también lo hace nuestro deseo de reencontrarnos con símbolos que definieron nuestra sensibilidad.