
En las últimas semanas, hemos visto cómo se ha reactivado el debate en torno al uso de dispositivos inteligentes y pantallas digitales en la educación.
En este contexto, Ainhoa Marcos, VP Education Spain de ODILO, la edtech española especializada en la creación de Ecosistemas de Aprendizaje Ilimitado, estima que:
· “Es importante distinguir entre la utilización de dispositivos tecnológicos con fines educativos y su uso para el ocio. Si bien es cierto que el uso del móvil en el aula para actividades no relacionadas con la educación puede distraer y perjudicar el aprendizaje, otros dispositivos como las tabletas y los ordenadores, ofrecen una oportunidad única para transformar el proceso educativo y preparar al estudiante para un futuro digital inevitable”.
· “El debate no se debe centrar en el uso o no de pantallas como un fin en sí mismo. Estos dispositivos son siempre un instrumento para alcanzar el objetivo formativo y/o curricular propuesto por la comunidad educativa. Con este punto de partida, el uso de las pantallas no es malo per se, y es necesario ser consciente del contenido y los métodos pedagógicos con los que se alimentan para determinar si realmente son una herramienta que potencia el aprendizaje”.
Asimismo, recuerda que:
· “Organismos internacionales como la UNESCO o la OCDE reconocen el valor del uso de dispositivos inteligentes y la tecnología con fines educativos, multiplicando las posibilidades y recursos formativos que el profesorado enseña a sus alumnos. Los vídeos, las animaciones y las simulaciones, entre otros materiales, enriquecen el proceso formativo, facilitando la labor del docente y, por tanto, el aprendizaje del estudiante”.
· “En ningún caso estos dispositivos están llamados a sustituir la labor del maestro. Son un complemento ideal de las lecciones que se imparten en el aula, con miras a conseguir un componente experiencial que es necesario en todos los aspectos de la vida de las personas. Asimismo, son una ventana a la digitalización del aula, permitiendo el acceso a una gama más amplia de contenidos, y a adaptar dichos recursos a las necesidades y estilos de aprendizaje de cada alumno, avanzando en materia de personalización educativa como motor para mejorar la asimilación de los contenidos curriculares”.
· En ODILO creemos que la innovación educativa no solo es cuestión de tecnología, sino de acceso, equidad y formación continua. Por eso, nuestro compromiso es garantizar que todos los docentes, estudiantes y familias tengan acceso a contenidos de calidad que les permitan desarrollar todo su potencial.