Lo primero que tenemos que tener en cuenta es saber la diferencia entre «email marketing» y «envío de email masivo«. Ya sabes aquello de que «Lo bueno si es breve, dos veces bueno» o la expresión que hemos oído muchas veces de «voy a ver si limpio la bandeja de entrada».

Son muchos los que pensamos que en la bandeja de entrada nos vamos a encontrar un montón de correos que no nos van a servir de nada y que, simplemente, borramos sin ni siquiera abrirlos. ¿Es realmente eso lo que queremos? ¿Que nuestros correos se unan a esos correos que el usuario ni siquiera abrir? ¿O queremos enviar correos que el usuario abra porque lo que le mandamos le aporta un valor añadido?

Lo primero de todo es saber qué es el email marketing.
Es una forma de marketing online que utiliza el correo electrónico como medio de comunicación entre un remitente y los suscriptores. Éste, a su vez, puede ser de varios tipos. Los más comunes son los informativos, promocionales, de venta o, simplemente, de contacto. Es una herramienta que nos permitirá hacer llegar nuestro mensaje a un público muy objetivo.

Lo que más interesará en este tipo de correos, orientados al marketing, es el contenido que aportamos al receptor de dicho correo. Gracias a la segmentación que podamos aplicar, podremos saber si nuestros suscriptores están interesados en un tema u otro; si está interesado en libros infantiles o en libros de cocina o en libros de autoayuda.

Y aquí es donde un buen email marketing entrará en acción, ya que vamos a intentar crear una relación con el cliente, no sólo intentar realizar una venta cueste lo que cueste.

También, dentro de la interación o el engagement, podremos saber qué hacen nuestros suscriptores con los correos que les enviamos: ¿los abren?¿hacen click en los enlaces que incluimos en los correos?¿los llevan a la carpeta de «correo no deseado»? Todo esto nos lo dará la herramienta de email markenting que utilizamos.

Otro dato que tenemos que ver es el empezar a trabajar con una posible base de datos que ya tenemos, ya sea porque la hemos obtenido de otras campañas, o en alguna feria, o por contactos que han llegado a nuestra página web,… Pero tenemos que tener mucho cuidado a la hora de trabajar con esta base de datos, ya que, posiblemente, muchas direcciones de correo puede que estén mal, que no existan o que, simplemente, sean falsas. Para ello, lo mejor es realizar segmentaciones o dividir la lista en otras sublistas más pequeñas y manejables, que nos permitirán conocer qué direcciones son correctas y cuáles «no funcionan» y nos están produciendo una tasa de rebote que penalizará nuestro email marketing.

Una vez realizada esta «división» y «comprobación» de que todas las direcciones de correo que tenemos son correctas, nos pondremos manos a la obra: ¿qué vamos a comunicar?¿cómo lo vamos comunicar?¿con qué frecuencia lo vamos a comunicar?

Si quieres saber más de este tema, pincha aquí y tendrás muchas más información. https://blog.mailrelay.com/es/2017/01/17/como-hacer-mailing
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