Los resultados de un análisis de la huella de carbono de AMD en su 6ª generación de Unidades de Procesamiento Acelerado (APU) serie A, con nombre en clave “Carrizo”, han demostrado que usar el nuevo procesador puede resultar en una reducción del 50 por ciento de las emisiones de gases de efecto invernadero comparado con la generación anterior de APUs. Los resultados del estudio están basados en el ampliamente aceptado Protocolo de Gases de Efecto Invernadero (GHGP), establecido por el Instituto de Recursos Mundiales (WRI) y el Consejo Empresarial Mundial para el Desarrollo Sostenible (WBCSD), y han sido anunciados hoy durante el panel de medios patrocinado por AMD sobre eficiencia energética en tecnologías de la información. La investigación muestra que el 60 por ciento de las compañías que aparecen en la lista Fortune 100 han establecido objetivos públicos para reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero1.
“Crear productos que consuman poca energía y que sean eficientes es el elemento principal de nuestra estrategia de negocio y a su vez, estamos trabajando junto con nuestros clientes para reducir la huella medioambiental de la tecnología, mientras mejoramos el rendimiento sin descanso,” ha dicho Papermaster, vicepresidente senior y jefe de Tecnología de AMD. “Los resultados del estudio de la huella de carbono para las últimas APUs de AMD demuestran nuestro compromiso para continuar fomentando la eficiencia energética, la sostenibilidad y reducir los costes de operación para los consumidores y las empresas.”
Una empresa cliente que renueve 100.000 PCs que usaban la generación previa de procesador de AMD y cambie a la APU de 6ª generación Serie A de AMD, puede ahorrarse alrededor de 4.9 millones de kilovatios hora de electricidad — más o menos 495.000$— y 3.350 toneladas métricas de CO2 (lo mismo que alimentar 461 hogares) a lo largo de los 3 años de vida del producto2.
En 2014, AMD anunció una meta ambiciosa para mejorar el uso típico de la eficiencia energética de sus APUs móviles en 25 veces para el 2020, partiendo del año 20143. Alcanzar los objetivos de la iniciativa 25×20 requiere incrementar el ritmo de aumento de la eficiencia usando nuevas características de administración de la energía y diseños innovadores. Las mejoras en eficiencia energética necesitadas para cumplir esta meta rompen con la tendencia histórica de eficiencia de la Ley de Moore por lo menos en un 70 porciento4. Eso significa que en 2020 un ordenador podrá cumplir una tarea en una quinta parte del tiempo que un ordenador de 2014, mientras consume de media menos de una quinta parte de la energía. Usando un coche como analogía, este ratio de mejora sería como convertir un coche de 100 cv que recorre 12 kilómetros por litro en un coche de 500 cv que recorre 63 kilómetros por litro, en tan solo 6 años.
“Reducir las emisiones de carbono es lo que hay que hacer por el medioambiente, y además proporciona beneficios adicionales reduciendo el gasto de los individuos y las empresas en electricidad,” ha dicho Kevin Krewell, investigador principal de Tirias Research. “AMD hizo una promesa atrevida hace 15 meses de haber mejorado la eficiencia energética de sus procesadores 25 veces en 2020. Una reducción proyectada del 50 por ciento en fase de uso de los gases de efecto invernadero en la 6ª generación de APUs Serie A de AMD es una prueba más que suficiente de que la compañía está haciendo grandes progresos en su compromiso para conseguir un planeta más limpio y unas facturas de electricidad más bajas.”
La 6ª generación de APUs Serie A de AMD es el primer producto presentado bajo la iniciativa 25×20 y representa un gran paso en la eficiencia energética para las APUs móviles de AMD.
AMD ha sido reconocida recientemente por el Índice de sostenibilidad Dow Jones por decimocuarto año consecutivo. En mayo, AMD apareció en la lista de los 100 mejores ciudadanos corporativos de la revista Corporate Responsibility (CR) por tercer año consecutivo.